Remolque autónomo de equipajes en la nieve en el aeropuerto Gardermoen de Oslo

Como parte del proyecto AWARD H-2020, el tractor de remolque autónomo EZTow alcanzó recientemente un hito crítico en el aeropuerto de Oslo, operando en la nieve al nivel 4 de conducción autónoma (completamente independiente sin ningún humano a bordo del vehículo), marcando un paso importante en nuestro compromiso de ofrecer soluciones de movilidad autónoma fiables e innovadoras. Esta fase, centrada en evaluar la resistencia de nuestra tecnología de sensores frente a las difíciles condiciones meteorológicas de Noruega, formaba parte integrante del proyecto.

Remolque autónomo de equipajes en la nieve en el aeropuerto Gardermoen de Oslo

Funcionamiento en condiciones meteorológicas adversas

El EZTow se sometió a diversas condiciones adversas, principalmente para evaluar su rendimiento cuando la visibilidad es reducida y los sensores corren el riesgo de verse afectados. El vehículo demostró su robustez, sorteando con éxito las inclemencias meteorológicas y demostrando la fiabilidad de sus sensores en condiciones de estrés ambiental. Además, la finalización de las pruebas de salida de carril en taxi (TLD) demostró la capacidad del vehículo para mantener una navegación precisa y ceñirse estrictamente a la trayectoria designada. La evaluación continua del agarre de los neumáticos de invierno es también un componente crítico de las pruebas, garantizando que el EZTow mantiene una estabilidad y maniobrabilidad óptimas, incluso en superficies heladas.

Vehículos autónomos y nieve

Operar en condiciones de nieve presenta retos específicos para los algoritmos de percepción de los vehículos, lo que a menudo provoca un descenso de sus niveles de confianza. La complejidad del procesamiento de las señales de los sensores se intensifica cuando interfiere la nieve, lo que puede hacer que el sistema no detecte los objetos que se aproximan o perciba falsamente obstáculos inexistentes.

Este dilema se debe a varios factores propios de los entornos nevados. En primer lugar, el aspecto uniforme de los paisajes nevados disminuye el contraste, lo que dificulta que los sensores distingan entre los objetos reales y la propia nieve. Además, la dispersión de los copos de nieve en el aire puede distorsionar la percepción de la ubicación, la distancia o el ángulo de los objetos, dando lugar a lecturas inexactas. Tal vez lo más importante sea que la fiabilidad de un sistema autónomo depende del consenso entre las entradas de múltiples sensores. Sin embargo, la nieve plantea distintos retos a cada tipo de sensor, amenazando la armonía y el acuerdo necesarios para que el sistema se forme una idea coherente y precisa de su entorno. Resolver estos problemas es fundamental para garantizar la seguridad y fiabilidad de la grúa EZTow en condiciones invernales.

Preparados para una integración perfecta

Julien Collier, coordinador de proyectos de EasyMile, comparte sus impresiones sobre este logro: «La adaptación a las condiciones de nieve es un reto en el que estamos progresando activamente. Hemos realizado pruebas exhaustivas, tanto simuladas como in situ, que nos han permitido integrar mejor en las operaciones las capacidades de conducción sobre nieve. Estas pruebas son fundamentales para las operaciones aeroportuarias del EZTow, ya que garantizan una integración perfecta».